Los otros

(Quiero empezar diciendo que tengo miedo a equivocarme. ¿Cómo puede tener miedo dios?—exclama el teólogo valiente... Pues teniéndolo. Los mortales han dicho muchas barbaridades sobre los dioses, dibujándolos según lo que creen mejor de sí mismos. Por eso hay tantos dioses bellos, fuertes y valientes, y tan pocos, o ninguno, como yo.)

Tengo miedo de equivocarme cuando me digo a mí mismo, feliz, que he descubierto a otros dioses. Creo que es un miedo justificado… ¡Cuantas veces, después de interminables eras luchando contra mi propio olvido, he acabado descubriendo, cuando ya me parecía que esta vez sí que era la verdadera, que se trataba de otro engaño!

Pero esta vez no me equivoco. Con mis quince años tengo experiencia suficiente para saber que esta vez va de verdad. Declaro que he descubierto a los otros... Al menos a uno. La grandeza del descubrimiento hace inútil la consideración de lo que se ha descubierto. Sea lo que sea, es lo más grande que se ha descubierto nunca. Que sean mil o que sea uno solo, ¿qué diferencia hay?

No hay comentarios.:

dios cristo jesús jesucristo adolescente dioses fe papa de roma omnipotencia religión decretos divinos cristianismo cristiano musulmán islam judaismo judío credo rosario